Lectio Divina DOMINGO DE LA XVI Semana del Tiempo Ordinario- P. Julio Gonzales C. OCD

21.07.2013 17:14

 

Lecturas bíblicas:

a.- Gn.18, 1-10: Señor, no pases de largo junto a tu siervo.

b.- Col.1,24-28:El misterio escondido por siglos ha sido revelado.

c.- Lc.10, 38-42: Marta lo recibió en su casa. María ha escogido la parte mejor.

Esquema

1.- Invocación al Espíritu Santo: Ven Espíritu Santo…

2.- Acto Penitencial: Perdón Señor….

3.-Oración colecta: Muéstrate propicio con tus hijos, Señor, multiplica sobre ellos los dones de tu gracia, para que encendidos de fe, esperanza y caridad, perseveren fielmente en el cumplimiento de tu ley. Por nuestro Seño.

4.- Lectio divina:

a.- ¿Qué dice el texto?

- “Yendo ellos de camino, entró en un pueblo; y una mujer llamada Marta, le recibió en su casa” (Lc.10, 38).

El evangelio nos presenta una escena familiar: Jesús en casa de Marta y María. Tema central del texto es la comparación de eta dos discípulas en la que una se deja llevar por una actividad exagerada, la otra se limita sólo a escuchar a Jesús. Ambas podría representar, en una segunda interpretación eclesial, las hermanas representa la diaconía una y la otra la proclamación de la Palabra. Por medio de Lucas y Juan, encontramos el testimonio de mujeres ricas que ayudaron a Jesús y los apóstoles con sus bienes en la tarea evangelizadora (cfr. Lc.8, 1-3). Marta lo recibe en su casa lo que la hace hija de la paz, la que ha escuchado el evangelio del reino y que heredará la vida eterna (cfr. Lc. 10, 6.9. 25); su hermana María parece más joven. En su hogar se va a celebrar un banquete, por ello se afana en preparar una comida digna del huésped que tiene que atender; Jesús y María mientras, tanto conversan.

- “Tenía ella una hermana llamada María que sentada a los pies del Señor escuchaba su palabra” (Lc. 10, 39).

ÉL habla ella escucha sentada a los pies del Maestro. Su postura es la de los discípulos judíos a los pies de sus maestros (cfr. Jn.12,3; Hch. 22,3).  Mientras la primera se dedica al servicio, la otra escucha a Jesús, goza de su compañía en forma casi exclusiva. La primera protesta, está agobiada, está haciendo demasiadas cosas y está perdiendo la oportunidad de estar con el huésped (cfr. Eclo. 11,10-11). Se queja doblemente a Jesús, primero porque  no se percata del trabajo que ella está haciendo, y por otra parte, le pide interceda ante su hermana para que le ayude en su quehacer. Las dos terminarían pronto la labor, lo que le permitiría también a ella a sentarse a escuchar a Jesús. Jesús la reprende cariñosamente, suavemente, pero con la intención que reflexione (cfr. Lc.6, 46; 8,24; 13,34; 22,31). “Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas; y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la parte buena, que no le será quitada.” (vv. 41-42). No la va a regañar por que trabaje, sino por la forma en que lo está haciendo, inquieta y nerviosa, lo que la puede conducir a nada (cfr. Lc.12, 25). Jesús quiere que Marta se preocupe de lo esencial para su vida como es escuchar la palabra de Dios, que constate que tanto trabajo, como creyente la puede alejar de la fe y de ÉL que la visita. Incluso que piense que los manjares los puede reducir al mínimo, con tal de no perder su paz y poner sus preocupaciones en las manos de Dios. Mientras Marta representa el trabajo agobiante y repetitivo, esclava de hacer muchas cosas, no tiene tiempo para escuchar acerca del misterio del reino de Dios que llega.

- “María ha escogido la mejor parte, que no le será quitada” (Lc.10, 42).

Su hermana, en cambio, María escucha la palabra de Jesús, hace una sola cosa, la única necesaria (v.42), para ponerla por obra. Marta representa la acción que no está plenamente en comunión con la palabra de Jesús, como no abierta a la palabra de Jesús; María, al estar abierta a su palabra, está dispuesta a amar al prójimo y servirlo. Conocer a Dios en Israel significaba escuchar a Yahvé, y poner en práctica su palabra, María corresponde plenamente al Israel, que escucha a Dios. Ella atiende a Jesús y lo escucha, porque le revela el misterio escondido, así como el judío escucha la Ley de Yahvé, revelada en el pasado. El AT, insiste en la importancia de la escucha, lo mismo encontramos en el Nuevo (cfr. Dt. 8, 1-3; Lc.19, 1-10; 1Cor. 7, 32-35). María representa al verdadero cristiano, que cumple la palabra de Dios. Para que las acciones de amor al prójimo del creyente, estén  cimentadas en la escucha de la palabra de Dios, es necesario, acoger el misterio del amor de Dios, que se refleja en Cristo Jesús. En la medida que se mantiene la comunión de amor con Jesucristo, es decir, la fuerza de su misterio revelado, se puede ser apóstol de ese amor que lo inunda en su vida interior. Esta experiencia,  produce un tipo de cristiano que profundiza en su fe, porque escucha a Jesús, como María, lo que se convierte en fundamento de la verdadera contemplación, es decir, obediencia a la palabra y gozo de convertirla en realidad desde la fe, la esperanza y la caridad teologal. Pensemos en una María misionera, que comunica la palabra escuchada, de lo contrario hubiera sido reprendida por Jesús como Marta.

 

b.- Momento de oración.

c.- ¿Qué me dice? - ¿Qué le digo? - ¿A qué me comprometo?

- Me dice que todo momento es bueno escuchar a Jesús, los momentos los escoge ÉL, basta con estar atentos a su querer.

- Marta se preocupó demasiado del recibimiento, María fue a lo esencial, compartir con Jesús, el mejor invitado que paga con creces las atenciones de las dos mujeres.

- Lo único necesario para el cristiano, es mantener la comunión con Cristo Jesús, vivir de su Evangelio y servirle con la escucha y la oración.

- Ser trabajólico finalmente, cansa, una vez probadas las fuerzas, lo mucho o poco que hagamos por el prójimo hacerlo bien. Sólo el amor despierta a amar y obrar.

- Otros testimonios…

5.- Momento de oración y contemplación:

a.- Salmo 14,2-5: Señor ¿quién puede hospedarse en tu tienda?

- El que procede honradamente/ y práctica la justicia, / el que tiene intenciones leales /

y no calumnia con su lengua,

- El que no hace mal a su prójimo/ ni difama al vecino; / el que considera despreciable al impío/ y honra a los que temen al Señor.

- El que no presta dinero a usura, / ni acepta soborno contra el inocente./ El que así obra nunca fallará.

 b.- Relectura bíblica que hace S. Teresa de Jesús de este pasaje evangélico:

Teresa de Jesús, queriendo resaltar la vida contemplativa, aconseja, que primero  tenemos que ser Marta y luego María. La vida activa y contemplativa han de ir muy unidas porque ambas pretender servir al Señor Jesús, que viene a visitarnos. “Marta y María han de andar juntas para hospedar al Señor… ¿Cómo le diera hospedaje María, sentada siempre a sus pies, si su hermana no le ayudara?” (7 M 4,12).

6.- Alabanza: Te alabamos Señor.

- Te alabamos Padre, por tu Hijo, que nos hospedas en tu Reino, como Marta a tu Hijo, te alabamos Señor.

- Te alabamos Padre, por tu Hijo, que nos visita con su Evangelio y Eucaristía, te alabamos Señor.

- Te alabamos Padre desde todos los que escuchan, como María de Betania tu Palabra y te sirven como Marta, desde ellos y con ellos te alabamos Señor.

- Te alabamos Padre desde los jóvenes que se reunirán con el Papa para que habiendo escogido la mejor parte, vivan para lo único necesario, desde ellos y con ellos te alabamos Señor.

- Otras alabanzas…

7.- Preces: Te lo pedimos Señor.

- Te pedimos Padre por la Iglesia y el Papa, por su testimonio para que siga abriendo caminos luminosos para todos los cristianos, te lo pedimos Señor.

- Te pedimos por la paz en todo el mundo, para que el diálogo y la búsqueda del bien común ayude en el progreso de los pueblos. Te lo pedimos Señor.

- Te pedimos por la Jornada de la Juventud en Brasil, para la Iglesia se vea renovada en su adhesión a Cristo, a su Evangelio y al Papa. Te lo pedimos Señor.

- Otras preces…

8.- Padre Nuestro

9.- Abrazo de la paz

10.- Bendición final.